By James E. Gierach, Law Enforcement Against Prohibition
Recently, the Chicago Sun-Times published a good series,
“Chicago Under Fire”, except for the series’ exclusion of the central-pillar
solution to ending the gunfire and a news-coverage blackout of the events and
people proclaiming it.
Mexican
poet Javier Sicilia and bus loads of Mexican victims and survivors of the War
on Drugs traveled 2,000 miles to Chicago (and nearly 4,000 miles to 25 U.S.
cities in all) to call for an end to the violence by ending the War on
Drugs, a public policy called “Public Enemy No. 1” by yours truly, a former
Chicago drug and homicide prosecutor and board member of not-for-profit Law
Enforcement Against Prohibition (LEAP).
Former
Los Angeles Deputy Chief of Police Stephen Downing, and 20-year head of its narcotics
division, also traveled with Javier from California and spoke with others at a
press conference held last Tuesday (Sept. 4, 2012) at the Cook County Building
calling for an end to the War on Drugs to stop the violence. The day
before, hundreds of people marched through Chicago’s Little Village and
Lawndale communities, marching not against drugs but against the war on drugs,
a Chicago first.
But
WTTW-TV’s “Chicago Tonight” declined an invitation to Javier or Downing to tape
its show, and the “End the drug war” story did make it into “Chicago’s Week In
Review.” Like the Chicago Sun-Times, the PBS station provided no
news coverage of the press conference calling for the legalization and control
of drugs to stop the violence or Chicago’s first march calling for an end to
the war to stop the violence and reduce drug harm.
News
coverage of the three days that Sicilia’s “Caravan for Peace with Justice and
Dignity” was in Chicago was scant to nonexistent: editorial board interviews were
not extended by two of the nation’s largest newspapers, and photographs of
LEAP’s police cruiser SUV wrapped with signage that said “Legalize drugs to
stop the violence” and “End the drug war to save our kids,” and photographs of
LEAP’s 30-foot banner that proclaimed “End the drug war to stop the killing”
went unpublished.
The
fault seems to lie with news editors and not the assignment desk, the former
charged with an awesome responsibility to decide what the public shall read,
hear and see and what it won’t.
Tuesday’s
press conference attracted half-a-dozen TV-cameras, one major newspaper other
than the Chicago Sun-Times, some radio stations and local Hispanic media. But
the news stories, tapes and photos were largely filed in the circular file once
it hit the desks of editors.
Pitifully,
mistakenly and narrow-mindedly, bullet-riddled Chicago Under Fire was insulated
from the drug policy reform message from Mexico and U.S. drug cops, judges and
prosecutors. The next Chicago Sun-Times series could be called,
“Chicago’s Prohibition Solution Under Cover.”
La Solución
a la Prohibición Encubierta en Chicago
Por James E.
Gierach, Agentes del
Orden Publico Contra la Prohibición
Hace poco, el Chicago Sun-Times
publicó una serie, “Chicago Bajo Fuego”,
la cual fue buena salvo que
excluyó de la serie la solución
central para poner fin a los disparos, y la cobertura de los acontecimientos y las personas que proclamaban tal solución.
El poeta mexicano Javier Sicilia
junto con víctimas y sobrevivientes de la Guerra contra las Drogas en México llenaron buses y viajaron 2.000 millas a
Chicago (y casi 4.000 millas en total a 25 ciudades en los EE.UU.) para pedir
el fin a la violencia terminando la Guerra contra las Drogas, una política
pública que yo, un ex-fiscal de drogas y homicidio en Chicago, y miembro de
la Junta Directiva de la organización sin fines de lucro, Agentes del Orden
Publico contra la Prohibición (LEAP, por sus siglas en ingles) clasifico como
“Enemigo Público No. 1”.
El ex-Subjefe de la Policía de Los
Angeles, Stephen Downing, que también fue jefe de la división de narcóticos por 20 años,
viajó con Javier desde California y habló con otros en una conferencia de
prensa el martes pasado (4 de sept., 2012) en el edificio de Cook Country
pidiendo fin a la Guerra contra las
Drogas para terminar con la violencia.
El día antes, cientos de personas de las
comunidades de Little Village y Lawndale en Chicago, por la primera vez en la historia
de Chicago marcharon no en contra de las drogas, sino en contra de la Guerra
contra las Drogas.
Pero el programa de WTTW-TV “Chicago Tonight” declinó una invitación a Javier o Downing a participar
en su show, y la noticia de “Ponerle fin
a la Guerra contra las Drogas” nunca llegó a “Chicago’s Week In Review.” Asi como
el Chicago Sun-Times, la emisora PBS no tuvo cobertura de esta conferencia de prensa
pidiendo la legalización y regulación de las drogas para terminar con la
violencia, o de la primera marcha en Chicago que demanda el fin de la Guerra par acabar con la violencia y reducir los daños causados por
las drogas.
Durante los tres días que la
“Caravana de Paz con Justicia y Dignidad” de Sicilia estuvo en Chicago, la
cobertura de la prensa fue escaso o
inexistente: no fueron invitados a entrevistas
con los
comités editoriales de los
periódicos de mayor circulación de la nación, y las fotografías del carro de la
policía de LEAP envuelto con letreros que decían: "Legalizar las drogas
para acabar con la violencia" y "Poner fin a la Guerra contra las
Drogas para salvar a nuestros niños", y fotografías de la bandera de
30-pies de LEAP que proclamaba "Ponerle fin a la guerra contra las drogas para acabar
con los asesinatos" nunca fueron publicados.
La culpa no cae en las asignaciones
de lo que van a cubrir los reporteros, sino en los editores de noticias encargados con la alta responsabilidad de
decidir que podrá leer, oír, y ver el
público y lo que no.
La conferencia de prensa del
martes atrajo a media docena de cameras de televisión, un periódico grande que
no fue el Chicago Sun-Times, algunas emisoras de radio y medios hispanos locales. Pero las noticias, grabaciones
y fotos en gran parte fueron archivados cuando llegaron a los escritorios de los editores.
Lamentablemente, erróneamente,
con mente cerrado y lleno de huecos el
programa “Chicago Bajo Fuego” no
incluyó el mensaje de de la policía anti-narcótica, jueces y
fiscales de México y de los EE.UU a reformar la política de las drogas. La
próxima serie del Chicago Sun-Times debe de ser llamado, “La Solución a la Prohibición Encubierta en Chicago.”
No comments:
Post a Comment